Bachelet; La mujer de la transición
¿Representó su triunfo presidencial el lograr resolver nuestro pasado reciente y avanzar hacia la construcción de una nueva democracia?
"Francisca: Sí. Porque todas las torturadas reaccionan distinto.
Macarena: Sí. Hay mujeres que no se recuperan.
Carla: Sí. Y hay mujeres que se organizan y construyen museos.
Francisca: Sí. Y hay mujeres que se convierten en presidenta de la república."
Villa Guillermo Calderón.
Michelle Bachelet, es una médica y política chilena, que se caracterizó por haber sido la primera presidenta chilena elegida de manera democrática ocupando el cargo en dos ocasiones. Michelle Bachelet, tiene una historia de vida ligada a los acontecimientos políticos de la dictadura y la transición, en su juventud mientras estudiaba medicina en la Universidad de Chile militaba en las filas del Partido Socialista chileno, su padre el General Alberto Bachelet, que era cercano al gobierno de la Unidad Popular, ocurrido el golpe de Estado fue detenido y torturado hasta la muerte por las fuerzas represivas de Augusto Pinochet, debido a que el ex comandante de la Fuerza Aérea habría sido uno de los hombres de confianza del ex presidente socialista: Salvador Allende. Frente a esta situación, Michelle Bachelet y su madre Ángela Jeria, fueron detenidas y torturadas en Villa Grimaldi para posteriormente ser exiliadas. Sin embargo, este exilio no duraría mucho, puesto que en 1979 Michelle y su madre volverían a Chile y ambas mantendrían una posición contraria a la dictadura chilena.
Un intento de superación en medio de socavones
Yo sé que de mí, esperan palabras sobrias y abrazos para todos. Como siempre.
Discurso, Guillermo Calderón.
Con la vuelta a la democracia, Bachelet comenzará su carrera política, no inmediatamente en la década de los 90, donde se enfocará en su carrera de Medicina y trabajaría como asesora de la cartera del Ministerio de Salud. Va a ser con el socialista Ricardo Lagos, donde tendría su primera oportunidad de ocupar un cargo en la primera línea de la política estatal, Lagos la designa en el cargo de Ministra de Salud. Luego, Michelle fue seleccionada por el mismo Presidente para ser Ministra de Defensa, transformándose así en la primera mujer iberoamericana en tener dicho cargo.
historia personal de dolor y conflicto marcó profundamente a los sectores populares que la comienzan a ver como una posible figura de poder para otros cargos.
La historiadora María José Cumplido en entrevista con nosotros dice lo siguiente, respecto a este primer recuerdo público de Michelle Bachelet: ¨Causó mucho impacto, esta mujer torturada, hija de padre asesinado, estaba conviviendo con sus “enemigos”, eso generó una idea falsa de superación de la dictadura¨.
A partir de este hito, comienza una carrera política de Michelle, la que fue en ascenso de manera aceleradísima, que la llevaría el año 2006 a convertirse en Presidenta de nuestro país.
Michelle, pionera de muchas
“Porque hoy voy a ser otra, más dura y es raro porque siempre he sido reservada y elegante, he sido atractiva para
hombres depresivos pero no se enamoran de mi, les gusta mi sonrisa se imaginan que un día los voy a abrazar con el
alma de la vida, perdónenme si ofendo a los fascistas o si ofendo a los que quieren un final feliz, pero yo prefiero los
finales agridulces queridos compatriotas me despido a las puertas de mi salida del servicio público, a las puertas de la
casa de La Moneda me despido y no tengo aviones bombardeándome la casa, perdónenme que no les diga trabajadores
de mi patria, son otros tiempos, y ustedes me conocen, sé donde estoy parada, soy inteligente, soy sensible y está mal
que yo lo diga pero también soy alegre, honesta, humilde, sobria incluso me han dicho maravillosa, no sé a la gente le gusta
que reconozca mis errores, no es que haya habido muchos, pero siempre me echo la culpa de todo y soy generosa
incluso perdonaría a mis torturadores…. si es que me hubieran torturado.”
Discurso, Guillermo Calderón.
La cita que antecede a esta sección y a la anterior corresponde a una obra de teatro del reconocido dramaturgo chileno Guillermo Calderón, escrita el 2009, llamada Villa + Discurso, la pieza dramática se compone de 2 pequeñas obras, en la segunda, Discurso, Calderón ficciona el discurso de despedida de Bachelet de su primer mandato como presidenta de Chile. En este fragmento se nos muestra una ficción creada a partir de la historia de vida de Michelle, mujer atea, divorciada, profesional, de izquierda y con una marca pública respecto a su padre y su experiencia como presa política; que a pesar de todo este background logra llegar al mayor cargo de poder político de Chile.
Bachelet durante su campaña propone la consigna: ¨Bachelet estoy contigo¨, demostrando así este sello de cercanía que gran parte de la ciudadanía chilena hasta el día de hoy recuerda. Con un discurso potente respecto a combatir la desigualdad, con cierto enfoque de género, cuidada por su coalición política, que en ese entonces veía con cierta suspicia que una mujer presidenta se autoplocamara feminista, Michelle logra triunfar en las elecciones y fue elegida como Presidenta el año 2005. En cuanto a la cantidad de votos, Bachelet se posicionó en el cargo con un 53,5% de apoyo ciudadano. Asimismo, es importante recordar, que más del 50% de estos votos a Bachelet, correspondían a la población femenina. De esta forma, la ex presidenta dio el puntapié inicial a su plan político.
Michelle, comenzó su primer gobierno con el apoyo de la concertación de partidos por la democracia. Sin embargo, a diferencia de su símil Ricardo Lagos, Michelle Bachelet se diferenció por no provenir de los sectores elitistas de la coalición. Asimismo, la ex mandataria asume con la tarea de disminuir la brecha de género entre hombre y mujeres, puesto que tal y como lo dijo Francisco Vidal en la entrevista que realizamos: ¨el problema de protección al final, a los sectores vulnerables y al género femenino, era una demanda que había dejado pendiente la concertación durante el Gobierno de Ricardo Lagos¨. Bajo esos desafíos, la ex mandataria decide crear un programa esencial para el desarrollo social de nuestro país: ¨Chile Crece Contigo¨, que tenía como fin disminuir las brechas de desigualdad entre las infancias de niños provenientes de sectores vulnerables y acomodados, a través de un programa integral de acompañamiento del Estado para todas las mujeres que tienen hijos en el sistema público. Este programa contempló, obras tales como cubrir el costo del parto, la atención pre y post natal, la atención de salud al recién nacido, la construcción de salas cunas más equipadas y que permitieran la seguridad de los hijos e hijas de madres solteras.
Este plan estatal, no solo generó grandes aplausos en la clase política en general, sino que también en las madres de Chile que se veían representadas por Michelle Bachelet, una mujer divorciada, que no solo se hizo cargo de la educación de sus hijos, sino que también de la salud de las madres de Chile.
También a pesar que el gobierno no buscó tener un carácter “feminista” propiamente tal, hubo preocupación respecto a legislar sobre la interrupción del embarazo, tal como nos contó el historiador Luis Thielemann, que menciona esto sobre el primer gobierno de Michelle Bachelet: ¨Su histórica ministra de salud (de Michelle Bachelet), Soledad Barría, qué va empezar a empujar incipientemente proyectos de aborto, por lo menos de despenalización¨. A través de ese emergente proyecto, se comenzaría a construir la ley del aborto en tres causales, el cuál en el segundo Gobierno de Bachelet va a lograr promulgarse como ley.
Como grupo, sabemos que no nos corresponde hablar en nombre del movimiento feminista, pero es menester entender que una de las grandes demandas existentes, que tiene que ver con el derecho a que las mujeres decidan por sobre su cuerpo, fue instalada en el debate político durante el primer gobierno de la Presidenta Bachelet.
Finalmente, la hasta entonces Presidenta, termina su primer mandato presidencial con un 84% de respaldo ciudadano, dando cuenta de que sus programas políticos, tuvieron gran eficacia en el público femenino.
Chile sonríe con Michelle
“No nos olvidemos del pasado me subí a un tren en marcha, aunque traté por ejemplo lo que más he soñado es que la
gente tenga trabajo, pero para que hubiera trabajo he tenido que mantener todo igual, la economía, y lo igual se ha
puesto desigual y lo bueno se ha puesto peor, perdón, perdón pero si se acuerdan bien tampoco me eligieron para
cambiarlo todo, me eligieron por otra cosa, para darse un gusto, para ser felices por un rato para que les amasara un
pan con sabor a justicia, para ver mi foto sonriendo en las oficinas públicas, para que fuera la mejor presidenta de la
historia y por eso muchas gracias, fue un triunfo de todos.”
Discurso, Guillermo Calderón.
Luego de haber dejado la política de lado y de haberse tomado un receso, Michelle Bachelet decidió postularse a la presidencia nuevamente a través de las elecciones del 2013, donde se consagró como amplia vencedora con 62,1% de los votos. Sin embargo, en esta elección se encontraba bajo el apoyo de la Nueva Mayoría, que fue la nueva coalición encargada de renovar a los partidos de la concertación después de haber sufrido una derrota en las elecciones pasadas. Una de las renovaciones que tuvo la coalición, fue el hecho de incluir la mirada del feminismo al debate político, puesto que muchas feministas se vieron motivadas con la segunda llegada de Michelle e incluso, la ex presidenta aprovecharía ese apoyo para seleccionar nuevos gabinetes ministeriales que aspiraban a la paridad de género.
Este gobierno de Bachelet es clave hoy para analizar la transición, ya que sus proyectos y objetivos estaban encaminados a lograr terminar con las macro estructuras que había dejado de legado la dictadura, por ejemplo: Las pensiones que dependían solamente de la capitalización individual. Frente a eso, su gobierno propone crear un pilar solidario que ayudara a las personas que se pensionaban con montos de miseria. La llamada Democracia protegida bajo el sistema binominal, fue reemplazada por un sistema proporcional bajo el gobierno de Michelle Bachelet.
Ante los bajos aranceles impositivos para el capital empresarial, su gobierno propone una reforma tributaria que permitiría robustecer las arcas fiscales. Finalmente propone en su gobierno la creación de una nueva constitución, instalando e invitando a la ciudadanía a pensar y soñar una nueva carta fundamental que modifique la estructura del Estado chileno que la dictadura había dejado en la constitución política de 1980.
Por lo que en este segundo gobierno de Michelle Bachelet, se comenzó una serie de legislaciones que permitirían construir un Chile más igualitario. Una reforma tributaria, que permitía el aumento de impuestos a las personas más ricas del país: Una reforma laboral, que fortalecía la organización sindical y la negociación colectiva por sobre la negociación individual de trabajador y empleador.
Y una de las reformas más aclamadas por el público femenino fue: ¨Más sonrisas para Chile¨, un proyecto estatal, que velaba por la salud bucal de las mujeres provenientes de sectores vulnerables de nuestro país, debido a que muchas de las mujeres trabajadoras no podían acceder a pagar por atención dental, lo que llevaba a que fueran discriminadas al momento de buscar trabajo, por razones estéticas.
La reforma tributaria, así como el plan de una nueva constitución que nos atrevemos a afirmar que el gobierno de Bachelet, fue sumamente visionario respecto al tema, fueron proyectos que la oposición política al gobierno se encargó de rechazar y modificar de manera que lo logrado fuera mucho menos de lo que proyectaba el gobierno de Michelle. Tal y como lo dice María José cumplido en una entrevista: ¨esa mirada, quizá transformadora, no tuvo las bases políticas en su propio partido, entonces ahí también vemos como choca una mirada de una presidenta mujer, con una idea particular de Estado¨.
Finalmente, Bachelet termina su segundo mandato con un 40% de apoyo ciudadano. A pesar de haber tenido una inmensa cantidad de reformas positivas, ciertos cargos del gabinete fueron acusados de corrupción, sumado al escándalo mediático de su hijo mayor, acusado de malversación de fondos y abuso de poder.
Finalmente, su gobierno terminó de mala forma, por lo que la izquierda nacional se vio obligada suceder en el cargo y traspasarlo al empresario de la derecha política chilena, Sebastián Piñera.
Palabras al cierre sobre Michelle
“No sé si se han dado cuenta pero me van a echar tanto de menos, tanto, les voy a hacer tanta falta porque yo, hablemos
un poco de mí, ya les hablé de la vergüenza bueno yo, yo tengo buena mano, tengo hijos maravillosos soy hija de militar,
también toco la guitarra y toco a la gente que me quiere, tengo una vida de película, tengo dolores en el pecho, sentí un
frío atroz en Alemania, estuve exiliada de la vida, estuve en la lista negra de los malos tuve casa de ladrillo tuve
salamandra, pertenecí al red set de los 80 soy pediatra de los niños y lloro abrazando a mis amigas, tampoco nos
olvidemos de que soy atea, vivo una sola vez, no tengo fe en la fe, porque un día miré el sufrimiento de la vida y dije no es
posible, no es posible que si dios es dios si es todo poderoso y omnipresente y bueno y dios es todo eso sea responsable de
esto que haya creado esto….”
Discurso, Guillermo Calderón.
Al inicio, propusimos de título a esta columna Bachelet la mujer de la Transición y nos planteamos una interrogante sobre su rol.
Michelle Bachelet fue presidenta de Chile en dos ocasiones, actualmente es la Alta comisionada de las Naciones Unidas para la protección de los Derechos Humanos, ella, nos trasciende en importancia y en su legado. Mientras, ella ocupa este cargo mundial, la sociedad chilena ¿Ha logrado avanzar hacia una nueva democracia? ¿Ha podido resolver los problemas o el legado que nos deja la transición política chilena?
Creemos que no, lamentablemente creemos que no, cuando vemos que por ejemplo a inicios de agosto del año 2020, un grupo de personas de la sociedad civil chilena se molesta porque un libro infantil que relata los hechos ocurridos a partir del golpe de Estado, menciona que Pinochet “se tomó el poder”. Es decir, aún tenemos un pasado que sigue generando conflicto y discordancia social. Donde además los medios de comunicación avalan esta mirada binaria del conflicto, esta idea de que el gobierno militar logró cosas positivas y algunas negativas. Como grupo, pensamos que donde se permite debatir sobre lo bueno y malo de un golpe de Estado, se da cuenta de que aún no se ha logrado avanzar hacia una nueva mirada de la Democracia.
Sin embargo, no podemos negar el legado político que tiene Michelle Bachelet en sus dos gobiernos, y luego en su rol a nivel mundial. No nos cabe duda, de que aún queda mucho por trabajar en la política democrática nacional, pero sí tenemos claro de que hoy las mujeres exigen que nunca más sea sin ellas, que nunca más se las deje excluidas del debate político, porque a través del ejemplo de Bachelet, quedó claro de que todas las mujeres en Chile deben exigir su llegada a la esfera pública, no por su testimonio de madres o desde una esfera tradicional de lo femenino, sino que porque la agenda feminista viene para quedarse, porque permite espacios realmente democráticos e inclusivos.
El primer desafío que tuvo Bachelet como Ministra de Defensa, fue dar respuesta a una torrencial lluvia que azotaba a las ciudades de nuestro país. Bajo el propósito de ayudar y rescatar a las personas que habían perdido sus hogares o que se encontraban estancadas en un socavón, el Presidente Lagos decide enviar a los militares a las calles. A pesar de que los militares se encontraban en misiones de ayuda y rescate, la institución seguía generando terror en la sociedad chilena, producto de la memoria social de la dictadura. Frente a esa situación, Bachelet decide subirse a un tanque de rescate y tal y como se ve en la imagen, la ex mandataria vistió un traje militar y ella misma se dedicó a rescatar a las personas vulneradas, provocando, así, en la sociedad y opinión pública chilena una percepción positiva de ella como Ministra de defensa. Esta idea de calidez femenina, carisma y cercanía que lograba superar su
Michelle Bachelet como ministra de defensa